El pasado fin de semana, las autoridades de la Ciudad de México realizaron el rescate de dos cocodrilos bebés que fueron encontrados en distintas estaciones del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro. Ambos reptiles fueron hallados en las estaciones Río de los Remedios de la Línea B y Balderas de la Línea 1.
Primer hallazgo: Río de los Remedios
El primer cocodrilo fue descubierto la noche del sábado 21 de septiembre en la estación Río de los Remedios, ubicada en la Línea B del Metro. El pequeño reptil fue encontrado en el andén, lo que generó preocupación entre los usuarios y el personal del sistema de transporte.
De inmediato, el personal de seguridad del Metro solicitó la intervención de la Coordinación de Gestión Integral de Riesgo y Protección Civil del Metro y la Brigada de Vigilancia Animal (BVA) de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC). El cocodrilo, que fue identificado como un ejemplar de la especie Crocodylus moreletii, fue rescatado sin incidentes y trasladado para su evaluación.
Segundo hallazgo: Balderas
El segundo cocodrilo fue encontrado el domingo 22 de septiembre en la estación Balderas de la Línea 1, mientras caminaba por los desagües de la estación. Los usuarios del Metro dieron aviso a las autoridades al notar la presencia del reptil, que fue rescatado poco después por los elementos de la BVA. En un video compartido por la SSC, se puede ver al pequeño cocodrilo caminando por las escurrideras antes de ser asegurado por los rescatistas.
Ambos cocodrilos a salvo
Los dos cocodrilos fueron trasladados a las instalaciones de la Brigada de Vigilancia Animal en la alcaldía Xochimilco, donde recibieron atención por parte de un médico veterinario zootecnista. Posteriormente, se evaluará su estado de salud y se determinará su canalización a un lugar adecuado para su bienestar.
El Metro y la SSC emitieron una tarjeta informativa confirmando que los reptiles estaban en buen estado y agradecieron la colaboración de los usuarios para reportar estas situaciones. Hasta el momento, no se ha determinado cómo los cocodrilos llegaron a las estaciones del Metro, aunque se especula que pudieron haber sido abandonados de forma ilegal.
Este inusual incidente resalta la importancia de no adquirir ni abandonar fauna silvestre en espacios públicos, ya que representa un riesgo tanto para los animales como para las personas.