
El miércoles por la noche, la quinta edición de La Casa de los Famosos 2024 fue escenario de un emotivo reencuentro entre Paul Stanley y Mario Bezares. Paul, hijo del recordado Paco Stanley, ingresó al reality show para cerrar un capítulo doloroso en su vida y poner fin a las especulaciones que durante años lo han vinculado con Bezares.
Un “freeze” histórico
Paul solicitó un “freeze” a la producción para congelar a los habitantes de la casa y dirigirse a cada uno de ellos, comenzando con Arath, Karime, Briggitte, y Gala, a quienes les dedicó palabras de apoyo y reconocimiento. Pero el momento más esperado fue cuando se acercó a Mario Bezares, el excompañero de su padre. Con la voz entrecortada, Paul le dijo:
“Estoy en paz contigo. Ya solté lo que llevaba dentro y quiero dejar todo atrás. Te deseo lo mejor a ti y a tu familia.”
Bezares, paralizado por el freeze, no pudo responder en ese momento, pero una vez descongelado, se soltó en llanto. Sus compañeros lo abrazaron mientras expresaba:
“¡Qué gusto verlo! Nunca tuve nada en contra de él, y él lo sabe.”
Reflexiones y cierre de heridas
El emotivo intercambio fue clave para ambos, quienes han cargado con el peso de un episodio oscuro en la historia de la televisión mexicana desde la muerte de Paco Stanley hace 25 años. Paul, que recientemente se convirtió en padre, señaló que la paz que busca ahora es para él y su familia:
“Quiero que mi hija crezca con otra historia, recordar a su abuelo por el grande que fue, pero con una historia bonita.”
Este cierre de ciclo marcó un momento importante no solo para Paul y Mario, sino para la audiencia, que fue testigo de un gesto de reconciliación y sanación en la televisión mexicana.