
La tormenta Helene, que impactó con fuerza el sureste de Estados Unidos la semana pasada, ha dejado hasta ahora un saldo de 130 personas fallecidas. La cifra aumentó el lunes por la noche, mientras los esfuerzos de rescate continúan en las zonas más afectadas.
Afectaciones y respuesta de las autoridades
El presidente Joe Biden anunció que viajará a Carolina del Norte este miércoles para supervisar personalmente las labores de rescate y apoyo a las comunidades afectadas. Carolina del Norte ha sido uno de los estados más golpeados, con al menos 57 víctimas mortales. Otros estados como Carolina del Sur, Georgia, Florida, Tennessee y Virginia también han reportado decesos, sumando 130 fallecidos en total.
Además de las víctimas, las autoridades reportan más de 600 personas desaparecidas, lo que ha generado una intensa movilización de equipos de búsqueda y rescate. El número de desaparecidos podría aumentar en las próximas horas debido a las dificultades de comunicación y acceso a muchas áreas afectadas por las inundaciones y los cortes de energía.
Críticas y respuesta en medio de la campaña electoral
El impacto de Helene ha llegado en plena campaña electoral, lo que ha generado confrontaciones entre el presidente Biden y el exmandatario Donald Trump. Trump, quien visitó el estado de Georgia, criticó la respuesta del gobierno federal, afirmando que no estaba actuando con la rapidez necesaria para apoyar a los damnificados.
Biden respondió negando las acusaciones y calificándolas de “mentiras”. El presidente aseguró que su administración ha proporcionado toda la ayuda necesaria y que los recursos seguirán fluyendo mientras sea necesario. Además, destacó que su equipo ha estado en contacto constante con los gobernadores de los estados más afectados.
Consecuencias de la tormenta
Helene tocó tierra como un huracán de categoría 4 en Florida, antes de degradarse a ciclón postropical. A pesar de su debilitamiento, la tormenta dejó un rastro de destrucción en varios estados del sureste. Se estima que más de 1.7 millones de hogares y negocios aún están sin electricidad, y los servicios de telefonía móvil siguen interrumpidos en gran parte de las áreas afectadas.
El gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper, describió la devastación como “indescriptible” y señaló que muchas comunidades han sido prácticamente “borradas del mapa”. La magnitud de los daños ha puesto a prueba los recursos locales y federales, mientras los equipos de rescate luchan por llegar a las zonas más aisladas.
Cambio climático y futuras tormentas
El presidente Biden atribuyó los devastadores efectos de la tormenta Helene al cambio climático, señalando que este fenómeno ha intensificado la fuerza de los huracanes en los últimos años. Los científicos han advertido que los océanos más cálidos proporcionan energía adicional para que los huracanes se intensifiquen rápidamente, como fue el caso de Helene.
Las labores de rescate y reconstrucción continuarán en los próximos días, mientras se espera que el número de víctimas siga aumentando debido a las condiciones extremas y las dificultades para acceder a las zonas afectadas. Las autoridades han llamado a la población a mantenerse alerta y seguir las indicaciones de los equipos de emergencia.