La Organización Internacional del Trabajo (OIT) alertó que casi el 100% de la población de la Franja de Gaza vive actualmente en la pobreza, un año después del devastador conflicto entre Israel y el grupo islamista palestino Hamás. En su informe publicado este jueves, la OIT destaca que las consecuencias económicas y sociales de la guerra han sido desastrosas para Gaza, impactando gravemente a su mercado laboral y economía, con repercusiones que podrían durar generaciones.
Impacto socioeconómico de la guerra
Ruba Jaradat, directora regional de la OIT para los Estados Árabes, señaló que el conflicto no solo causó la pérdida de vidas y empeoró las condiciones humanitarias, sino que también transformó de manera fundamental el panorama económico de Gaza. Además, advirtió que la economía de Cisjordania, ocupada por Israel, también ha sufrido serios golpes, con una contracción económica significativa que duplicó la tasa de pobreza, pasando del 12% en 2023 al 28% en 2024.
Desempleo y pobreza en cifras alarmantes
El informe revela cifras preocupantes. En Gaza, el desempleo alcanzó un impactante 79.7% entre octubre de 2023 y septiembre de 2024. Por otro lado, en Cisjordania, la tasa de desempleo fue del 34.9% en ese mismo periodo. Estos indicadores reflejan la difícil situación que enfrentan las familias palestinas, muchas de las cuales luchan por cubrir necesidades básicas debido a la falta de empleo y el aumento de los precios.
Destrucción de infraestructura y alza en precios
La destrucción masiva de viviendas e infraestructuras en Gaza, así como el desplazamiento de trabajadores, ha paralizado gran parte de las actividades económicas en el territorio. Según datos de la ONU, el Producto Interno Bruto (PIB) de Gaza se desplomó un 84.7% en el último año, mientras que en Cisjordania cayó un 21.7%. A esta devastación económica se suma una inflación interanual del 248% en Gaza, lo que agrava aún más la situación de los residentes.
Un conflicto con un alto coste humano
El conflicto, que comenzó el 7 de octubre de 2023 tras un ataque de Hamás en el sur de Israel, ha dejado más de 42.400 palestinos muertos, en su mayoría civiles, según datos del Ministerio de Salud de Gaza respaldados por la ONU. En Israel, 1.206 personas perdieron la vida en el ataque inicial, en su mayoría civiles. Las secuelas de este enfrentamiento siguen afectando a millones de personas en la región.
La OIT concluye que la reconstrucción y recuperación económica en Gaza será un desafío monumental, y que las consecuencias de esta guerra seguirán presentes en la vida de sus habitantes durante mucho tiempo.
