El huracán Rafael, que había sido monitoreado desde el 5 de noviembre, ha cambiado su trayectoria y ahora representa una amenaza para México. Tras evolucionar de categoría uno a tres, el fenómeno meteorológico se ha acercado peligrosamente a la península de Yucatán, donde se esperan lluvias torrenciales y condiciones adversas para los próximos días.
El huracán, que comenzó como una tormenta cerca de Cuba, pasó a categoría 2 el 7 de noviembre, con vientos máximos sostenidos de 165 km/h y ráfagas de hasta 205 km/h. Actualmente se encuentra a 370 kilómetros al noreste de Cabo Catoche, en Quintana Roo, y se desplaza hacia el noreste. Este cambio de dirección ha alertado a las autoridades, ya que el huracán podría impactar la península de Yucatán y posteriormente llegar a Tamaulipas y Veracruz a partir del lunes 11 de noviembre.
Por ahora, los estados más afectados serán Yucatán, Quintana Roo y Campeche, donde se esperan intensas lluvias, fuertes vientos y oleaje de hasta 2 metros de altura en las costas. El Servicio Meteorológico Nacional también advierte que podrían generarse lluvias en otras partes del país conforme el huracán avance.
La temporada de lluvias y huracanes en México concluirá oficialmente el 30 de noviembre, pero se espera que el frente frío número 8 llegue a las fronteras noroeste y norte del país, trayendo consigo una caída de las temperaturas y fenómenos meteorológicos severos.