Durante una expedición realizada en octubre pasado por el equipo Pristine Seas de la National Geographic Society, científicos identificaron la colonia de coral más grande jamás registrada. Ubicado en las aguas de las Islas Salomón, este coral tiene unas dimensiones sorprendentes de 34 metros de largo por 32 metros de ancho, lo que lo hace más extenso que una ballena azul, el animal más grande del planeta.
Un hallazgo único
El descubrimiento, calificado como fortuito por Molly Timmers, científica principal de la expedición, ocurrió justo antes de que el equipo se trasladara a otra área. La colonia está compuesta por casi 1,000 millones de pólipos de coral genéticamente idénticos que trabajan juntos como un único organismo.
De color principalmente marrón con matices amarillos, rojos, rosas y azules, esta estructura de coral destaca no solo por su tamaño, sino por su estado de conservación, que contrasta con el deterioro generalizado de otros arrecifes debido a amenazas como el cambio climático, la contaminación y la acidificación de los océanos.
Ubicación y contexto
El coral se encuentra a 12 metros de profundidad en el Triángulo de Coral, una región conocida por su riqueza en biodiversidad marina. Según Timmers, su ubicación protegida por un talud y una plataforma submarina, además de sus aguas más frías, podría ser clave para su excelente estado de salud.
Este hallazgo no solo resalta la biodiversidad de las Islas Salomón, sino que también ofrece una oportunidad para fomentar la conservación de ecosistemas marinos vulnerables. La comunidad local espera que el descubrimiento impulse esfuerzos para establecer protecciones formales en la zona, asegurando la preservación de este tesoro natural para las futuras generaciones.