Más de 600 trabajadores de 25 empresas proveedoras de autopartes y servicios en Puebla entrarán esta semana en paro técnico tras el fin de la producción del modelo Tiguan en la planta de Volkswagen, ubicada en el municipio de Cuautlancingo.
Según Constantino Sánchez Díaz, secretario general de la Confederación Sindical Republicana (CSR), la medida busca evitar despidos masivos, aunque afectará temporalmente los ingresos de los empleados, quienes percibirán solo el 50% de su salario o tomarán días a cuenta de vacaciones.
Impacto en las empresas proveedoras
Sánchez Díaz explicó que este paro técnico afecta principalmente a las empresas proveedoras de materiales para la fabricación del Tiguan, que desde el pasado viernes cesó su producción tras años de ser uno de los modelos más emblemáticos de la armadora. En octubre, Volkswagen reportó la producción de 18,491 unidades de este modelo, que ha dejado huella tanto en el mercado como en la comunidad laboral.
Sin proyecto definido para las proveedoras
Aunque se realizan ajustes en la planta para la llegada de un nuevo modelo, aún no se ha definido un proyecto concreto que permita garantizar la continuidad de trabajo para las empresas proveedoras. A pesar de esto, el sindicato asegura estar trabajando para minimizar los reajustes y ofrecer estabilidad laboral a los empleados afectados.
Paro en Volkswagen Puebla
Por su parte, cerca de 1,800 técnicos de Volkswagen también iniciarán esta semana un paro técnico mientras se preparan las líneas de producción para el próximo modelo que ensamblará la planta. La última unidad del Tiguan está programada para salir de las líneas de producción el próximo martes 19 de noviembre, marcando el fin de una era para este vehículo.
La situación subraya los desafíos del sector automotriz en México, donde los cambios en los ciclos de producción tienen un impacto significativo en los trabajadores y proveedores.