
La madrugada del miércoles 27 de noviembre, una camioneta Cybertruck de Tesla protagonizó un accidente fatal en las calles de Piedmont, California. El vehículo, que presuntamente sufrió una falla en el sistema de navegación, chocó contra un árbol y posteriormente se incendió, dejando un saldo trágico de tres personas fallecidas y un herido.
Detalles del accidente
De acuerdo con testigos, el vehículo circulaba a alta velocidad y no involucró a otros automóviles en el accidente. Jeremy Bowers, jefe de la policía local, confirmó que la Cybertruck no estaba siendo operada manualmente al momento del impacto, lo que sugiere una posible falla en el sistema de conducción autónoma.
Los equipos de emergencia, liderados por el jefe de bomberos Dave Brannigan, lograron controlar rápidamente el incendio, reduciendo el riesgo de que la batería de iones de litio del vehículo se incendiara aún más, lo cual podría haber agravado la situación.
Historial de problemas técnicos
Aunque no se ha confirmado que una falla mecánica haya sido la causa del accidente, la Cybertruck, que lleva menos de un año en el mercado, ha enfrentado múltiples llamados a reparación. Recientemente, Tesla corrigió problemas relacionados con el inversor eléctrico, cámaras de visión trasera, molduras, limpiaparabrisas y otros componentes menores.
Estos antecedentes han generado preocupaciones entre usuarios y expertos sobre la seguridad de los vehículos, particularmente en modelos como la Cybertruck, que incorporan tecnología avanzada y sistemas de conducción autónoma.
El desafío de los incendios en vehículos eléctricos
El accidente también pone de manifiesto los desafíos asociados con la gestión de incendios en vehículos eléctricos. Aunque los bomberos actuaron con rapidez, el fuego dificultó la evacuación de los ocupantes. Este tipo de incidentes ha llevado a expertos a solicitar protocolos más específicos para atender emergencias con automóviles eléctricos.
Investigación en curso
Las autoridades continúan investigando las circunstancias exactas del accidente, incluyendo la posibilidad de un error humano o una falla en los sistemas avanzados del vehículo. Tesla no ha emitido comentarios al respecto, pero el incidente plantea preguntas sobre la seguridad de los vehículos eléctricos de alta gama y el uso de sistemas de conducción autónoma en entornos urbanos.
Este trágico suceso subraya la importancia de evaluar cuidadosamente la tecnología de los vehículos eléctricos y sus posibles riesgos, en un contexto donde la innovación y la seguridad deben avanzar de la mano.