
Un reciente análisis del telescopio espacial James Webb (JWST) ha descartado cualquier riesgo de impacto del asteroide 2024 YR4 con la Tierra. Sin embargo, los datos sugieren que existe una remota posibilidad del 2% de que colisione con la Luna.
Un asteroide en observación
Descubierto en diciembre de 2024, el asteroide 2024 YR4 fue observado con mayor precisión en marzo de 2025, lo que permitió determinar que su diámetro es de aproximadamente 60 metros, con un margen de error de siete metros. Inicialmente, las estimaciones variaban entre 40 y 90 metros.
Aunque las probabilidades de impacto con la Luna son bajas, los científicos están atentos, ya que, de ocurrir, el choque podría afectar una zona de 80 a 100 kilómetros en la superficie lunar.
Oportunidad para la ciencia
Los astrónomos consideran que, de confirmarse el impacto, sería un evento sin precedentes en la historia del monitoreo espacial. La colisión permitiría obtener información valiosa sobre la formación de cráteres lunares y el comportamiento del terreno circundante.
Además, estudios previos han determinado que el impacto no representaría un peligro para la Tierra, ya que el material desprendido no llegaría a la atmósfera ni afectaría satélites en órbita.
Próximos estudios y misiones futuras
El equipo de investigación planea realizar nuevas observaciones con el JWST en mayo, antes de que el asteroide entre en una fase en la que no será visible hasta 2028.
El estudio de 2024 YR4 también abre la posibilidad de que en el futuro se utilice su trayectoria para ensayos relacionados con la defensa planetaria y la minería espacial, temas clave en la exploración del espacio.